Ráfagas

Suaves y con eterna precisión
es el viento que azota , el fuerte tifón

Y soy igual,
igual que aquellos que inician al buscar
    con qué fuerzas cuento
    contra este horrendo mar

El mar que algún día
En tiempos de paz
 Mi refugio era, mi sostén , mi solaz

Allí donde miles de veces
Tu amor he ido a escuchar
Al decir en el presente
     Tu voz hoy vendrá

Y espero

Pero nada.
¿Será que se perdió?
       El mensaje. EL mensajero. La respuesta.

Y no llega.
Desolación. El silencio desgarrador ¿Será esa la respuesta?

Y temo.

Pero en ese mismo mar en precaria condición,
Natural para el mar,
    Horrenda para sus habitantes de paso
Y ante las ráfagas
Que en una pequeña barca se quieren refugiar

¿Acaso no le importa a nuestro tripulante especial?

No escuchas, no te inmutas,
¿No vás a despertar?

¡Ráfagas!

    Mudez y silencio son el día proclamar y la noche se alarga.

Y aún sin respuesta, el escenario cambia

Despiertas y dices: ¡Calma!

Aún los vientos y el mar te obedecen
Y un corazón en ansiedad
Imitándoles , a tu voz igual se calmarán

Y mientras, la respuesta llega
El descanso es posible

No era un tripulante especial,
 ¡Siempre has sido el capitán!

El Mes Fantasma: ¿De qué Tienes Miedo?

Este mes se celebra el mes fantasma. Mañana es el clímax de este mes de celebración....al temor. Todas las tiendas, hogares, empresas, oficinas, universidades y oficinas gubernamentales exhibirán altares en los que será quemado dinero falso e incienso y en dónde serán ofrecidos alimentos y bebidas para los espíritus, demonios y fantasmas del otro lado.

La creencia, es que durante el todo el séptimo mes del calendario lunar, a los espíritus se les permite atormentar toda la isla de Taiwán. En el día de mañana, en especial representa el clímax de esta celebración. Durante este mes de manera especial, muchos taiwaneses no se acercan a ningún cuerpo de agua con fines recreacionales. La mayoría, a pesar del caliente y húmedo verano, no se bañan en las playas por temor a que los espíritus se los lleven y se puedan ahogar. Esto llega a extremos en los que muchos, no saben nadar porque se han criado bajo este temor. 

Hoy ha llegado el Tifón. Y en medio de la tormenta, luego de que las aguas han calmado un poco, acabo de salir por las calles elevadas de Danshui para ir al supermercado.  

De camino, encontré algunas calles desoladas y llenas de las tradicionales pasolas, exactamente 11,000,000 de ellas que existen en Taiwán, para servir sus 23,000,000 de habitantes. 

Sin embargo, mi esperanza de que los efectos del tifón asistieran en apaciguar a los fieles adoradores de espíritus en su intento de apaciguar los espíritus, fantasmas y demonios que profundamente, ellos creen, andan sueltos con derecho de hacer daño a su paso, como a ellos les parezca y sin ninguna restricción, esta esperanza ha sido en vano.

La realidad es que altares, habían sido cuidadosamente colocados en frente de los negocios de muchos taiwaneses, que ahora incluso llamo amigos. 

Esto entristece mi corazón, pero a la vez se convierte en un profundo recordatoria, (como si fuera posible olvidarlo) de porque estoy aquí, y porque ustedes son colaboradores en el establecimiento del reino y la extensión y proclamación del evangelio, aun desde la distancia, de este lado del planeta.

Así una vez más les pido que se nos unan en oración para que Dios se revele a los corazones,que el evangelio les resplandezca y que nos dé la firmeza y fidelidad para predicar el evangelio, enseñar fielmente su palabra y servir en el fortalecimiento y desarrollo de una iglesia local que tenga la Palabra de Dios como su fundamento y que expandan su reino bajo el poder del Espíritu Santo.