La semana pasada termine mi historia antes de mi viaje en tren. Es importante entender que el tren de 12 horas que tome, implico dormir en un cuarto de aproximadamente 2 mts x 2 mts, con 4 "camas" o literas y compartiendo en la litera inferior con la misionera que me acompanaba en este "interesante" trayecto y dos desconocidos: una senora de aproximadamente 70 anios y un senor tal vez rondando los 40 que ocupaba toda la anchura y longitud de su camarote y un poco mas.
Trate de darle las gracias al individuo y volver a dormir. Sin embargo, a partir de ahi senti una presencia misteriosa. Al tornarme al otro lado pude ver como mi companero de viaje extendia su brazo para alcanzarme como si tratara de abrazar a un peluche (yo), a traves de espacio abierto que nos separaba entre las dos literas. Obviamente entre intercediendo y como buena dominicana defensiva nada mas pensaba "hay si me topa te corto la mano! hum!".
Despues de dos o tres horas de vigilia, alrededor de las 6 AM pude conciliar el sueno y confiar que Dios me protegeria (y al individuo) hasta llegar a Erdenet a las 8:00 AM.
Finalmente me reuni con mi equipo y tengo en mi coleccion de anecdotas una interesante anecdota mas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por sus comentarios. Una vez revisados y moderados procederemos a su publicación